¿No has obtenido los resultados que imaginaste con tus copys? ¿Quieres llegar a más personas? El storytelling capta a tu público objetivo.
El mundo del copywriting es complejo.
Necesita estudio y paciencia.
Sin embargo, hay un secreto que te puede ayudar a vender.
Hace unos años se hizo un estudio psicológico en el que se determinó que el 80% de las personas se sentían más identificados cuando la publicidad tenía una historia.
De hecho, la mayoría afirmó que era en estos casos que se decidían por comprar.
Sin embargo, no todas las historias venden.
Hay una estrategia específica que debes seguir para hacer historias que conecten con tu cliente objetivo y concreten ventas.
Como dice Seth Godin “El marketing ya no se trata de las cosas que vendes, sino de las historias que cuentes”.
Basándonos en esto, te enseñaremos cómo ponerle picante a tu historia y hacer que tus ventas suban como la espuma.
¿Qué es el storytelling y por qué puedes usarlo para generar más ventas en tu negocio?
Si traducimos la palabra directamente al español podemos sacar que “story” significa historia y “telling” contar.
Entonces la traducción más exacta sería “contar historias”.
Sin embargo, no es tan simple como eso.
El storytelling en marketing no solo tiene que entretener, también debe conectar con las emociones del lector.
Debe tener un objetivo, un principio, un medio y un final que lleve a una epifanía.
Es decir, tienes que adaptar una historia para tocar el dolor del cliente objetivo y solucionarlo en el final de la historia.
Además, debe tener una moraleja que lo persuada a comprar tu producto o servicio.
Algo sutil, tampoco vas a decirle directamente que te lo compre porque entonces se pierde la magia.
Saber contar una historia es como saber pescar.
Manejas el anzuelo tan perfectamente que casi ningún cliente se te escapa. Lo enganchas y lo dejas queriendo más.
Este es tu objetivo cuando haces storytelling capta a tu público objetivo: que queden enamorados.
Una buena historia puede ser más persuasiva que una promesa directa
Cuando una historia se cuenta bien, puede dejar intrigado a cualquiera.
Esto ocurre mucho en la vida diaria: el primer párrafo de una novela o las primeras líneas de una noticia puede dejarte enganchado.
Es porque conecta con tus emociones y te intriga.
Esto es lo mismo que tienes que aplicar al hacer storytelling.
Existen muchas páginas webs que presentan contenido con información directa.
No obstante, esta no es la mejor forma vender.
El contenido tiene que tener alma, imprimir tu personalidad en él y hacer que brille por sí mismo.
Una buena historia es aquella con la que el lector se siente identificado.
Que la lee y reconoce sus dolores o problemas en ella.
Hacen que se despierte el lado emocional.
Hannah Arendt mencionó que “el storytelling revela el sentido sin cometer el error de definirlo”.
Cuando cuentas una historia, no tienes que explicar nada.
La historia habla por sí sola.
Esto es lo que la hace mágica.
Si enfocas la historia en una situación similar a la que pasa tu cliente objetivo, tienes la fórmula perfecta para concretar ventas.
¿Cuáles son los ingredientes que debe tener el storytelling perfecto?
Obviamente no existe una “receta” exacta.
Las historias se tejen depende de la personalidad de su creador y del cliente objetivo que se tiene en mente.
Sin embargo, existen algunos puntos que puedes tomar en cuenta para hacer historias dignas de Jane Austen.
Aquí te enseñamos los más relevantes para que tu storytelling capta a tu público objetivo:
1. Mensaje
Debes saber que el storytelling se encuentra dividido en dos partes:
- Story: la historia que cuentas y el mensaje que quieres que se transmita.
- Telling: la forma en que está contado.
Se dice que, si el mensaje es sólido, no importa si el telling es débil.
Pero si el mensaje no es muy fuerte, entonces no surtirá efecto, sin importar que todo lo demás esté perfecto.
El mensaje tiene que ser transmitido para generar un cambio de creencia en el lector.
Un impacto que lo haga darse cuenta de cosas en las que antes ni se había fijado.
Tienes que esforzarte en pensar en el mensaje antes de comenzar a escribir esta historia.
2. Personaje
Este es quién pasará todos los problemas de la historia y al final tendrá una revelación.
Debe generar empatía, que el lector se sienta conectado con él.
Tu deber es hacer el personaje a imagen y semejanza de tu cliente ideal para que este pueda sentirse identificado de inmediato.
3. Conflicto
Esto es lo que genera el interés en la audiencia.
En términos sencillos, es el problema que motiva al personaje y lo lleva a tener la gran epifanía para solucionarlo.
El conflicto es el que más debe estar ligado al cliente ideal.
Que ellos digan “yo estoy pasando por lo mismo” y quieran leer a ver cómo este personaje logra llegar a una resolución.
La epifanía no solo la tiene que tener el personaje, sino también el lector.
Tu deber es elaborar un buen problema y que la resolución se orientada a lo que quieres vender.
Así es como el storytelling capta a tu público objetivo.
4. Ambiente
Por último, pero no menos importante, debes ocuparte del ambiente.
Este es el lugar en donde sucede la historia.
Si eliges bien el ambiente y lo describes apropiadamente, no será tan difícil que el lector se conecte.
Alexia Herms, experta en Digital Marketing, opina que “lo que en mi infancia eran princesas y cuentos de hadas, hoy son personas con experiencias reveladoras”.
¡Y cuánta razón tiene!
El Storytelling es similar a escribir una novela.
Los detalles, aunque sean muy pequeños, tienes que cuidarlos.
De lo contrario, puede que un descuido te genera más pérdidas que ganancias.
La empatía y la conexión emocional son las mejores herramientas para concretar una venta
Cuando Stephen King estaba escribiendo su emblemática novela “IT”, ocurrió algo que le hizo cambiar el curso de su historia.
Ya estaba terminando y sin embargo este acontecimiento lo marcó tanto que decidió hacer un cambio de último momento.
En Maine, donde está ambientada la novela, ocurrió un asesinato atroz en 1984.
Uno que quedaría en la historia plasmado en las primeras páginas de esta famosa novela.
El personaje que fue asesinado en la novela fue llamado Adrian Mellon, mientras la víctima real se llamaba Charlie Howard.
Lo curioso es que el caso sucedió casi igual que en la novela: un grupo de jóvenes homofóbicos le dio una paliza a Charlie por su preferencia sexual y lo tiraron al río en donde murió por un ataque de asma.
En la novela, Pennywise, el famoso payaso, es quién lo asesina. La vida real es un poco menos fantástica y más oscura.
Stephen King retrató este asesinato e hizo que toda la comunidad que estaba horrorizada por el asesinato sintiera empatía. Conectó con el lector y lo conmovió.
Esto es lo que hace un maestro en el storytelling.
Lo mejor es que tú también puedes hacerlo, de una manera menos siniestra y más positiva.
Puedes hacer storytelling en redes sociales, con un post ocasional.
También puedes contar una historia mientras haces email marketing y hacer artículos que tengan contenido útil al mismo tiempo que cuentas una historia.
La historia no le resta valor a la información que das.
Por el contrario, le suma.
Es tu oportunidad para contar la historia más increíble de todas.
Puedes comenzar de forma un poco más sutil y después crear novelas completas llenas de drama.
Pronto estarás recibiendo el feedback positivo de tus clientes objetivos.
Si quieres aprender a profundidad sobre el storytelling, te dejamos nuestra guía Mejora tu Copy.